Perversiones en tu trabajo

Todos hemos tenido alguna clase de pensamiento o perversión con alguien del trabajo, siempre ha existido ese morbo a poder realizar alguna de las fantasías mas subidas de tono que tu mente pueda imaginar. Un simple polvo o el orgasmo mas escandaloso y duradero que hayas podido tener., son las posibilidades que rondan tu mente,Post ofrecido por la web impares en la cama.

Mas perverso te vuelves cuando tu jefa te recuerda a esas películas porno, esas veías siendo aun un niño con la puerta entrecerrada y el volumen al mínimo, donde aparecían esas mujeres vestidas con faldas cortas muy insinuantes, dejando mucho a la imaginación, pintalabios resaltando los carnosos labios que besaban los miembros de otros, esas gafas de oficinista que solo conseguían realzar sus facetas mas felinas y eróticas. Con todo eso tu jefa o compañera de trabajo te da ese punto caliente que tanto buscas en una mujer para conseguir el tan ansiado placer.

Apareces por la oficina un día tranquilo ya pensando en si este o el siguiente pasillo te llevaran a ver como va vestida, como va pintada, y que mirada te hecha, todo para poder imaginarla de una manera mas lasciva, mas excitante y en tu única y exclusiva compañía. Cuando por fin la ves no puedes evitar desnudarla con la mirada mientras dices “Hola, buenos días”. Acabas de cepillartela mentalmente poniendo los ojos mas lujuriosos que puedas poner. Acabas de imaginar como quedaría su pintalabios restregado por tu polla mientras ella se la mete profundamente en su boca, en tu mente ronda la sensación que produciría su lengua en la punta de tu pene girando de un lado al otro, dejando bien húmedo el miembro ya duro. Cierras los ojos y la ves de rodillas delante tuya con la falda recogida, metiéndose mano entre sus piernas, haciendo que sus dedos jueguen con su conejito y sus flujos resbalen por la palma de su mano.

Ya en tu puesto de trabajo la mente sigue pasándote malas jugadas pues ella aparece en tus pensamientos mas impuros a cada segundo que pasa, sabiendo que ella pasará pronto delante para revisar como va el día como hace cada mañana.

Cuando al fin se pasa por tu puesto para saludarte cordialmente escondes como puedes tus pensamientos tras el trabajo, intentas que no se note que te calienta pensar en ella y evitas mirarla a los ojos para que no lea en ellos lo que te dicta tu mente y tu pene.

Es inevitable mirarla, la tienes delante, es inevitable pensar en quitarla la camisa en ese mismo instante, piensas “¿se excitaría si ahora mismo la meto mano?”. La blusa que lleva es un poco escotada y deja ver ligeramente su ropa interior, ya tienes otro rato de calenton asegurado.

Mientras ella te habla del día y del trabajo tu no la escuchas solo ves ese sujetador en el suelo y una de tus manos en sus pechos, ella muy ansiosa te pide que le comas las tetas. Esos redondos pechos, ligeramente ovalados y bien puestos en su sitio, los pezones duros listos para pellizcarlos.
Cuando vuelves en ti ella se esta despidiendo de ti y tu solo puedes mirarla el culo y como lo mueve, que bonito estaría poder darle un azote mientras la tienes a cuatro patas delante. La tarde pinta larga.


Que imagen mas...mas...atrevida y apetecible, que mas dará el sitio y si hay gente delante, incluso esas ideas te dan mas morbo. Ya no puedes trabajar y hasta llegas a meterte mano bajo el pantalón. Ya solo te invade una idea, necesito echar un polvo. Tal es el punto de excitación que notas como empiezas a sudar y a ponerte nervioso, y cada vez te rozas mas por encima del pantalón. Llegas a tal punto que hasta buscas alguna foto subida de tono.


Es imposible y la siguiente idea que tienes es ir al baño a darle salida a tu fogosidad, en tu trayecto al baño no ibas a poder ir sin antes llevarte otra imagen mas de ella. Te la vuelves a cruzar justo en la puerta de los baños, ella esta saliendo del baño de las chicas y de nuevo tu mente y perversión juegan su partido. Las ideas aparecen “¿Que habrá estado haciendo?,¿Y si ha ido al baño a masturbarse?, ¿se habrá masturbado pensando en mi?”. Ya tienes tu polla de nuevo lista para la acción.

Por fin en tu objetivo y ya con los pantalones bajados, empiezas a masturbarte y cierras los ojos para imaginar la escena morbosa que te gustaría. Extrañamente no es en la oficina, es en su casa y lo que te había llevado a su casa eran temas de trabajo, pero ella tenía ganas de otra cosa.
La paja que te estas haciendo en el trabajo te esta sentando genial y hasta desaparece el dolor de huevos. Ya tienes otra imagen de ella encima tuya con la falda remangada y un tanga apartado por tu polla, que ya esta dentro de ella. Que viciosa es en tu imaginación, como pide más y más. Con la polla en la mano ya húmeda por sus propios flujos imaginas como si fueran los de ella mientras chorrea de lo caliente que esta la muy salida, ella con su blusa medio abierta con los pechos por fuera te hipnotiza con el sube y baja de sus pechos que botan delante de ti. ¿Que te impide imaginar algo mejor?, pues ahora ya te la imaginas a cuatro patas mientras la follas por detrás agarrándola de los hombros, no puedes tener mejor imagen de ella. De vuelta a la realidad estas a punto de correrte en el baño de tu trabajo y menuda paja te estas haciendo, vuelves a cerrar los ojos y la pones de rodillas delante tuyo con la boca bien abierta, ella esta pidiéndote que te corras en su boca y en su cara, te excita mucho que sea así de viciosa, que sea como una perrita en celo dispuesta a todo. El éxtasis de tu paja y de tu sueño llegan al mismo tiempo, tu corrida inunda en parte la boca de tu jefa y parte sale disparada por su cara, ella con muchas ganas la intenta recoger con sus dedos y los empieza a chupar como si fuera tu polla, tras este gesto increíblemente morboso a tu mirada se vuelve a meter en la boca tu polla para darla el toque final tras la corrida. 

Por fin le diste libertad a tu fuego interno, y ves que te has corrido enérgicamente, tras limpiarte y salir con una cara de felicidad muy lógica, llegando a tu sitio vas pensando “ojala pudiera hacer este pensamiento realidad”. Justo antes de sentarte vuelve a aparecer ella para decirte “Te estaba buscando, necesito que tengamos una reunión los dos para tratar algunos temas del trabajo, ¿Te parece que tras el trabajo charlemos en mi casa con un café?. EL KARMA TE HA ESCUCHADO